El eterno rival: uno tropieza mientras que el otro despega

 

Si señores, no están soñando, el R. Madrid pierde en la 4ª jornada de liga ante el Levante. Victoria muy merecida de los levantinos ya que apretaron hasta el final y sacaron totalmente del juego a un Madrid perdido sin sus estandartes desde el inicio como son el guapo, rico y buen Ronaldo y el talentoso Özil.
Es cierto que el partido se paraba cada dos por tres por piscinazos y patadas, lo que no quita el merito del Levante ya que los dos equipos repartieron por igual y desde mi punto de vista, Khedira no fue el culpable de la derrota vikinga, ya que fue expulsado por doble amarilla tras caer en la tangána producida por di María, sino Kone ya que marco el gol de la victoria para el equipo levantino en el minuto 22 de la segunda parte.

Destacar del encuentro, aparte de la labor tanto como defensiva como ofensiva del levante, la vuelta a las andadas de Pepe, y es que, un jugador tan temperamental, no es fácil calmar ante un rival que te gana tanto en juego como en el marcador.



Por otro lado y en el Manzanares todo es fiesta, ya que el proyecto Manzano ha despegado con éxito. Los culpables: Falcao y Diego. El colombiano por su hat-trick ante el Racing, y el brasileño por sus perlitas y su juego. Y es que estos dos jugadores han hecho olvidar por completo joyas del pasado como eran el Kun y Forlan aunque tampoco nos olvidamos del actual 13 Courtois ya que es un seguro en la portería rojiblanca. Al final el partido termino 4 - 0 gracias a un testarazo de Adrián.